La ciencia ficción y el sueño espacial dominaron la estética de Christian Dior, durante la Semana de la Alta Costura de París. El diseñador belga, Raf Simons, ideó una Primavera /Verano 2015 sobre un futuro inspirado en la estética de los años 50, 60 y 70, demostrando una extraordinaria capacidad para reinterpretar y mantener viva a la vez, la herencia del gran maestro Dior.
Desde los jardines del Museo Rodin, dónde se celebró el desfile, abrimos el tercer y último capítulo de la Haute Couture.
RETROFUTURISMO & PSICODÉLIA
La banda sonora de David Bowie, “Rock´n Roll Suicide”, “Its No Game” o “Moonage Daydream”, acompañaban los pasos de los modelos, que cómo figuras espaciales, aparecían cubiertas de impermeables en PVC estampados y semitransparentes. Debajo, vibrantes minivestidos de lentejuelas se dejaban acompañar de botas de látex que subían hasta la rodilla o bien se quedaban a ras del tobillo.
A medida que pasan los minutos, la pasarela se convierte en un sutil juego de nuevas siluetas desde ajustados monos de “jacquard” de lana hasta faldas de corte trapecio que se unían en el centro por una arandela, dejando los costados al descubierto, en un ejercicio de extraordinaria habilidad couture.
Por un momento, echamos la vista atrás, hasta los años 50 y el New Look mediante las icónicas faldas con vuelo por debajo de la rodilla, hábilmente estructuradas sobre un mar de diminutos y ordenados pliegues cuya función era de dotar de un volumen vaporoso, en una nueva y renovada versión de la “corola” de Dior.
El recital retrofuturista ideado por Raf Simmons, se convierte en una sucesión de superposiciones, de lentejuelas bordadas que llenaban de brillos a monos, vestidos y faldas y en una paleta cromática que combinaba verde con azul klein o amarillo, amenizando de esta manera el ambiente festivo de toda la colección.
SIN PERDER DETALLE
La combinación de materiales irreverentes, la gran variedad de colores, prendas y siluetas, lejos de confundir ofrecía un universo camaleónico, mágico y artesanal, inspirado en la odisea del espacio. Un viaje sublime, magistral y épico, que nos traslada a un futuro cimentado en el más glorioso pasado.